Por mucho que a toneladas de gente les aburra su juego, que digan que comete pasos en la mitad de sus acciones, que no aprovecha todo el potencial a su alrededor, que llega a resultar monótono y hasta consabido infractor… James Harden es uno de los mejores atacantes que la NBA ha podido parir en toda su historia. De eso hay poca discusión posible.
Todo el mundo conoce cuáles son sus trucos pero, aun así, la estrella de los Houston Rockets promedia 37,9 puntos por partido esta temporada e inaugura un nuevo buffet libre de anotación en cada partido.
Podríamos hasta decir que James Harden es ahora mismo el atacante más potente de la competición (true shooting de 62,4 y eFG% de 53,2). Que no lo decimos solo nosotros; todo un sensei de las artes de contención como Jimmy Butler reconoció de manera reciente que Harden le parece el jugador más difícil de defender en la actualidad.
A la pregunta de “quién te parece más imparable actualmente”, Butler respondió lo siguiente: “El tío está promediando 39 puntos. Eso es casi 40. Es James Harden. Es zurdito. Tiene tiro de media distancia, bombas, bandejas, mates, tiros libres. Es legendario por su paso atrás. Puedes decir que lo que hace son pasos, puedes decir que no. Los árbitros no lo pitan. Yo estoy plenamente con él”, podía responder Jimmy Butler, en una entrevista reciente para el portal The Players Tribune.
Asimismo, como gurú defensivo y experto en mitigar grandes talentos sobre la pista, Butler eligió a Michael Jordan por encima de Kobe Bryant —ante la misma pregunta de quién sería más difícil de parar—; a Kobe por encima de LeBron; a Vince Carter sobre Tracy McGrady; y a Dwyane Wade por encima de Paul Pierce.
Además, Butler señaló a Derrick Rose, el del MVP con Chicago, como el jugador más imparable con el que ha compartido vestuario jamás.